17 d’octubre del 2009

Hem llegit sobre: l'oïda absolut.

Es una característica poco común que les facilita la vida a muchos músicos. No obstante, el oído absoluto y la música no están necesariamente relacionados. Existen muchos músicos excelentes sin esta cualidad.

El oído absoluto –también conocido como oído perfecto- es la habilidad de una persona para identificar o recrear una determinada nota musical sin la necesidad de una eferencia externa. Es decir, alguien con oído absoluto puede entonar un sol, un la o cualquier nota sin haberla escuchado previamente. Esta capacidad se relaciona con la memoria auditiva, esto es, la capacidad para recordar determinados sonidos.

En realidad, el oído absoluto está relacionado más con la inteligencia lingüística que con la musical. De hecho, mientras que la proporción de personas con oído absoluto es muy baja (una entre 10.000 en los Estados Unidos), en aquellas poblaciones que hablan lenguas tonales (como el chino) la proporción aumenta considerablemente.

¿Qué tipos de oído absoluto existen?
De acuerdo con el New Grove Dictionary of Music and Musicians, el musicólogo Richard Parncutt y el psicólogo cognitivo Daniel Levitin identifican dos tipos básicos de oído absoluto: el activo y el pasivo. Mientras que los segundos logran identificar correctamente las tonalidades pero no son capaces de reproducirlas ellos mismos, los segundos pueden cantar cualquier nota solicitada sin referencias.

También existe una habilidad muy rara conocida como oído absoluto muy fino, en la cual quienes la poseen logran no solamente identificar las notas sino también reconocer cuándo una nota está ligeramente más aguda o ligeramente más grave que en el sistema de afinación común.

¿Todos los músicos tienen oído absoluto?
De ninguna manera. Por un lado, puede darse el caso de que una persona nazca con oído absoluto y que nunca se ejercite en la práctica musical, con lo cual el reconocimiento de las notas por su nombre no le será posible (si bien distinguirá entre las afinaciones). Por lo demás, muchísimos y muy talentosos músicos no tienen oído absoluto, y ésta es una capacidad que no se puede aprender.

Sin embargo, lo que caracteriza a los músicos es el poseer un buen oído relativo (la capacidad de distinguir los intervalos que separan a una nota de otra). Esta capacidad sí se aprende y se ejercita, y es necesaria para poder componer, reconocer escalas e improvisar. Gracias al oído relativo, una persona es capaz de reconocer si una pieza está sonando afinada o desafinada. Esta capacidad es mucho más común que el oído absoluto. A la vez, la mayoría de las personas con oído absoluto también tiene buen oído relativo.

Claro que muchas personas con oído absoluto sacaron ventaja de su capacidad y se transformaron en músicos brillantes. Por ejemplo, Yanni, Paul Shaffer, Mariah Carey, Ray Charles, Piotr Tchaikovski y Niccolò Paganini.