6 de febrer del 2011

Remeto informació rebuda sobre el "Debate sobre la incorporación de la Música a la Universidad"

5 de febrero de 2011
En marco del Centro Cultural Bancaja, se ha celebrado un debate bajo el título “La incorporación de la Música a la Universidad: una deuda pendiente.”, auspiciado por UNESCO-Valencia y la Fundación Bancaja.

Han participado como ponentes Josep Francesc Almería, presidente de la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana-FSMCV, Josep Lluís Sirera, vicerrector de Cultura de la Universidad de Valencia, Antonio Cucala, director académico del Grado en Bellas Artes de la Universidad Politécnica de Valencia, José Mª Vives, catedrático de Musicología del Conservatorio Superior de Música de Alicante, María José Ruiz, profesora de Danza Histórica del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, María Pérez, estudiante de Máster Oficial en Producción y Gestión Artística de la Universidad de Murcia, y Francisco Alcover, presidente de la Coordinadora de Enseñanzas Artísticas Superiores-CEEAASS.

Este acto es el tercer debate público sobre el tema que organiza la Coordinadora de Enseñanzas Artísticas Superiores, promotora del Manifiesto por la plena integración de las enseñanzas artísticas superiores en la Universidad, publicado en http://www.ceeaass.org, que tiene actualmente más de 3.600 adhesiones públicas.

Durante sus intervenciones, todos los ponentes han expresado la necesidad de la normalización de los estudios superiores de Música, a través de su incorporación al sistema universitario general, con todos sus beneficios y derechos, autonomía de todo tipo y la obligación de profundizar en la faceta investigadora del profesorado, que ha de ser compatible con sus funciones docentes.

La estudiante se queja de la desconexión entre algunas asignaturas del Máster que realiza con los conocimientos propios del área musical y la falta de profesorado en el Máster con competencias en este tipo de conocimientos.

El presidente de la FSMCV, entidad que suscribió el Manifiesto de CEEAASS en 2009, ha reiterado el apoyo de esta institución a la incorporación de la Música en la Universidad, por ser el cauce más apropiado para lograr la excelencia y la completa formación de los músicos profesionales.

El vicerrector de Cultura de la UV ha expresado la buena disposición de la Universidad más antigua de Valencia para albergar los estudios superiores de Música en sus seno, ofreciendo así esta línea formativa a los estudiantes, que ahora se agota, pese a los esfuerzos realizados en este sentido por la UV, por la desaparición de la optatividad con la implantación de los nuevos títulos de Grado y la extinción de la Diplomatura en Magisterio Musical. Sirera también ha indicado la necesidad de un cambio legislativo para la adecuación de la estructura académica musical al sistema universitario.

El director académico del Grado en Bellas Artes de la UV conviene en la necesidad de profundizar en las exigencias de calidad y los parámetros de diseño curricular del Plan Bolonia, para poder realizar una adaptación de la enseñanza musical a las estructuras universitarias “hablando todos el mismo idioma”, en sus palabras, y se muestra muy satisfecho el proceso de transformación de las antiguas escuelas de Bellas Artes en facultades universitarias, iniciado en 1978, gracias al desarrollo la Ley General de Educación de 1970, que ya entonces preveía la transformación en facultades de los conservatorios de música y las escuelas de arte dramático, pero que fue incumplida por los gobernantes.

El catedrático de Musicología, ha incidido en la ausencia de mecanismos de participación democrática en los centros, en la falta de autonomía para diseñar los nuevos planes de estudio, que vienen impuestos por la Administración, y en la necesidad de normalizar la situación del personal investigador de los conservatorios que participa en los programas de doctorado, con escaso reconocimiento de sus aportaciones, y atender las necesidades de los estudiantes de música que participan en dichos programas.

La profesora del Real Conservatorio de Madrid ha destacado la falta de información al profesorado que ha contribuido al diseño de los nuevos planes de estudio de la Comunidad de Madrid –experimentales, como los de la Comunidad Valenciana–, y la ausencia de criterios de interdisciplinariedad y transversalidad para su desarrollo, que disiente de las directrices de Bolonia.

El presidente de CEEAASS ha recordado las numerosas peticiones hechas desde hace más de veinte años al Gobierno para incluir las enseñanzas de Música en la Universidad, y la falta de sensibilidad política a estas peticiones, vulnerando el derecho fundamental de igualdad, que quizá esté relacionada con los interlocutores elegidos por el Gobierno y la falta de participación del profesorado de los centros en la toma de decisiones.

La opinión general que se deduce de las diversas intervenciones individuales y de las respuestas a las preguntas formuladas por el público es que la normalización de los estudios superiores de Música, mediante su incorporación al sistema universitario, es no solamente lógica y posible, y aconsejable desde el punto de vista del reconocimiento académico y administrativo de estas enseñanzas, sino que ya resulta un anacronismo que esto no se conceda, puesto que la demanda social existe y la petición es justa.

El impedir la transformación de estas enseñanzas, atendiendo a intereses personales en lugar de atender a los deseos de avance de la sociedad, resulta de una inadecuada interlocución entre los responsables políticos y los centros, que debería invertir ya esta tendencia si se quiere demostrar voluntad y sensibilidad, máxime cuando actualmente se están realizando votaciones claustrales en diversos conservatorios superiores españoles, como los de Granada y Málaga, en las que la apuesta por la vía universitaria para estos estudios ha sido respaldada prácticamente por unanimidad.